El flutter auricular y la fibrilación auricular son ambos tipos de arritmias cardíacas, que se refieren a un ritmo cardíaco irregular. Sin embargo, hay varias diferencias importantes entre las dos condiciones.
Ritmo: El flutter auricular es un trastorno del ritmo cardíaco en el cual el ritmo es generalmente regular, mientras que la fibrilación auricular es irregular. Es decir, en el flutter auricular, las contracciones auriculares son rápidas pero consistentes, mientras que en la fibrilación auricular, estas contracciones son rápidas e inconsistentes.
Ondas en el ECG: En el flutter auricular, las ondas en el electrocardiograma (ECG) tienen una apariencia característica llamada “onda de sierra”, esto es debido a que las aurículas laten a un ritmo mucho más rápido que los ventrículos. Estas ondas de alta frecuencia (típicamente alrededor de 300 latidos por minuto) se conocen como ondas F. Por otro lado, en la fibrilación auricular, el ECG muestra una línea de base irregular sin ondas P identificables, debido a la contracción descoordinada de las fibras musculares auriculares. Aunque en ocasiones se pueden apreciar ondas F (no confundir con las del flutter), estas no suelen ser tan claras como en el flutter auricular.
Tasa ventricular: La tasa ventricular (o cuántos latidos por minuto tiene el ventrículo) puede ser más predecible en el flutter auricular que en la fibrilación auricular. En el flutter auricular, las aurículas laten a un ritmo muy rápido, pero los ventrículos suelen latir a una velocidad mucho más lenta. Por el contrario, en la fibrilación auricular, el ritmo ventricular puede ser muy rápido e irregular.
Espero que con esta explicación quede más claro