¿Te has parado a pensar en la importancia de la alimentación a la hora de estudiar? Normalmente no le dedicamos la atención que se merece. Y la alimentación es de suma importancia cuando nos enfrentamos a largas jornadas de estudio. Vamos a explicar por qué.
Cuando estamos estudiando, más aún cuando preparamos una oposición, las comidas reducen su importancia a la mínima expresión (Me meto un sandwich y pa´lante), las eliminamos directamente (No tengo tiempo para comer) o dejamos una patatas o unos snacks para ir picando mientras estudiamos.
Ya no solo para el estudio, sino para nuestra salud en general, comer mal y rápido tiene muchas contraindicaciones. La principal es que no llegamos a tener sensación de saciedad, lo que nos invita a picar más, por lo tanto, engordar. Y el sobrepeso tiene graves consecuencias sobre nuestra salud.
Como influye la alimentación en la educación
Varios estudios han demostrado el impacto directo de la alimentación en la memoria, concentración, rendimiento cognitivo. A su vez hay una relación directa entre la alimentación sana y el estado de ánimo y la propia salud psicológica.
Comer bien significa:
- comer de forma equilibrada varias veces al día (cinco),
- no comer de forma impulsiva,
- rehusar en lo posible alimentos ultraprocesados,
- comer fruta y verdura de forma diaria, preferiblemente varias veces al día,
- reducir la ingesta de azucares procesados y dulces,
- reducir (o mejor aún, suprimir) la ingesta de zumos, bebidas carbonatadas y bebidas energéticas.
En definitiva, comer bien significa llevar una vida sana y pensar y planificar nuestra ingesta de alimentos. Estas recomendaciones harán que tu mente funcione al 100% para que puedas sacar el máximo partido posible a tus capacidades y apruebes tu oposición sin problemas.
